LAURICOCHA
Augusto Cardich, investigador de la paleohistoria sudamericana, nacido en La Unión (Huánuco) en 1923, realizó estudios en las regiones altas de Huánuco en las décadas de los 60’s y 70’s y encontró no solo importantes restos líticos sino también esqueletos humanos de niños y adultos con mas de 7,000 años de antigüedad. Estos descubrimientos hicieron posible establecer una secuencia cultural para las primeras ocupaciones altoandinas. Las cuevas de Lauricocha,
se ubican sobre un antiguo valle glaciar, entre los 3,900 y 4,200 m.s.n.m., y
al parecer albergaron a un importante grupo de cazadores y recolectores que por
miles de años utilizaron las cuevas como refugio natural.Augusto Cardich, investigador de la paleohistoria sudamericana, nacido en La Unión (Huánuco) en 1923, realizó estudios en las regiones altas de Huánuco en las décadas de los 60’s y 70’s y encontró no solo importantes restos líticos sino también esqueletos humanos de niños y adultos con mas de 7,000 años de antigüedad. Estos descubrimientos hicieron posible establecer una secuencia cultural para las primeras ocupaciones altoandinas. Las cuevas de Lauricocha,
La secuencia cultural, realizada a partir de los restos encontrados, posibilitó
la periodificación de tres fases. La primera fase Lauricocha I (10,000 – 8,000
a.C.) se caracterizó por el predominio de puntas foliáceas (forma hoja de
árbol) y cuchillos bifaciales, la segunda fase, Lauricocha II (8,000 – 5,000
a.C.) por la presencia de puntas “hojas de sauce” y otras de forma triangular y
base recta y la tercera fase, denominada Lauricocha III (5,000 – 4,000 a.C.) se
caracterizó por la utilización de utensilios pequeños (puntas) y herramientas
de hueso, aunque hay menos evidencia pues se encontró poca cantidad de
artefactos líticos. La dieta del hombre de Lauricocha, a partir del estudio de
los huesos animales encontrados en los diferentes estratos de las cuevas, se
basó en el consumo de cérvidos, principalmente tarucas para las primeras fases
y camélidos en menor proporción para la última fase. Esta diferencia en la
alimentación hace pensar que hubo cambios culturales entre los grupos humanos
lauricochienses que permitieron el perfeccionamiento en las estrategias de caza
llegando inclusive en sus época más tardía, a la domesticación de animales.
En las cuevas de Lauricocha, Cardich encontró once contextos funerarios, 4
adultos y 7 niños y los clasificó como dolicocéfalos (cráneo alargado, cara
ancha, de 1,62 m. de estatura). De ellos los mas antiguos están fechados entre
los 7,000 y 6,000 a.C.. Se cree que la diferencia en los patrones de
enterramiento entre niños y adultos fue intencionada y corresponde a un rito
especial para el cual se utilizaron ofrendas de distinto tipo. Junto a los
entierros de niños fueron encontrados objetos de sílex, puntas líticas,
cristales de óxido de fierro, fragmentos de hueso calcinado ocre rojo,
turquesas y valvas de concha.
No hay comentarios:
Publicar un comentario